Un estudio publicado por el Hospital General de Singapur (Región Central, Singapur) ha conseguido reducir la duración de la resonancia magnética (RM) en un 32% gracias a una secuencia de RM acelerada que mantiene la calidad de la imagen.
Este descubrimiento supone un avance extraordinario que puede repercutir en un mayor rendimiento del equipo, lo que permitiría reducir los gastos, disminuir la incomodidad del paciente durante el proceso y minimizar los artefactos del movimiento.
Método de realización del estudio
El estudio, liderado por Pohchoo Seow, investigadora del Departamento de Radiología Diagnóstica, de Singapore General Hospital, se centró en el uso de SENSE comprimido (SC), un método de codificación de sensibilidad comprimida que implica el submuestreo aleatorio de datos de resonancia magnética.
Para ello, se adquirieron noventa y cinco exploraciones por resonancia magnética de pacientes anónimos en diferentes regiones anatómicas, que constan de una secuencia de protocolo estándar y una secuencia acelerada con SENSE comprimido. Para evaluar su eficacia, un grupo de seis radiólogos especializados analizó aleatoriamente secuencias de los 95 pares de imágenes, que debían comparar observando la nitidez de las mismas, la relación señal-ruido percibida, la visibilidad de la lesión y los artefactos.
Resultados del estudio
Los resultados de esta investigación concluyeron que el tiempo total de exploración se redujo en un 32% y al mismo tiempo mantuvo una calidad de resonancia magnética aceptable para todas las regiones.
Separando los datos por regiones, el mayor ahorro de tiempo se observó en la columna, con una reducción media de 68 segundos o del 44 %; seguida por el cerebro (media = 86 segundos, reducción del 37 %). La secuencia con el máximo ahorro de tiempo fue la angiografía por resonancia magnética intracraneal 3D Time of flight, con una reducción de 202 segundos, equivalente al 56%.
En cuanto a la nitidez, la relación señal-ruido percibida y visibilidad de la lesión, SENSE comprimido fue ligeramente inferior al protocolo estándar. Por otra parte, en cuanto a la calidad de imagen general, SC fue equivalente a la secuencia del protocolo estándar para exploraciones de articulaciones y cuerpo pero ligeramente menor para las exploraciones del cerebro y la columna, siendo, de todas formas, aceptable para diagnóstico.
En conclusión, se observó una buena aceptación clínica general para SENSE comprimido (88%), una aceptación clínica total para las resonancias corporales (100%) y una alta aceptación para otras regiones (68%-95%).
En palabras de Pohchoo Seow, “las secuencias SENSE comprimidas eran casi equivalentes a las secuencias de estándar de atención y en gran medida se consideraron aceptables para el trabajo clínico de rutina diaria”. La investigadora también concluyó: “la implementación de SENSE comprimido mejoró el flujo de trabajo clínico existente y tiene un amplio potencial de alcance para mejorar la atención y la comodidad del paciente al reducir el tiempo de adquisición de la secuencia de resonancia magnética y acortar el tiempo total de exploración mientras se mantiene la calidad del diagnóstico de la imagen”.