En un estudio publicado recientemente por la revista Nature, se ha presentado una nueva inteligencia artificial creada por Google en colaboración con expertos del DeepMind, Cancer Research UK Imperial Center, Northwestern University y Royal Surrey County Hospital. Según el estudio, dicho sistema sería capaz de detectar el cáncer de mama con porcentajes de acierto mayores a los actuales de los médicos radiólogos.

Aunque todavía está en pruebas y no se ha puesto en práctica en un entorno real, los primeros datos obtenidos son muy positivos ya que ofrece mayor precisión en la detección del cáncer de mama, y el porcentaje de falsos positivos y falsos negativos es menor que la prueba más utilizada a día de hoy, la mamografía.

Funcionamiento de la IA y datos obtenidos

Esta herramienta basa su funcionamiento de detección del cáncer de mama exclusivamente en el análisis de imágenes de rayos X recientes, a diferencia de los radiólogos, que obtienen sus conclusiones a partir de las historias clínicas de los pacientes así como del análisis de resultados obtenidos en mamografías anteriores.

En el estudio realizado por los expertos se analizaron datos de mamografías de más de 76.000 mujeres del Reino Unido y 15.000 de Estados Unidos. Por otra parte, evaluaron con el sistema de inteligencia artificial a más de 25.000 mujeres del Reino Unido y 3.000 de Estados Unidos. Al comparar datos de ambos estudios, se pudo observar que en los grupos de mujeres de Estados Unidos los falsos positivos se habían reducido en un 5,7% y los falsos negativos en un 9,4%. Por su parte, en los grupos de mujeres del Reino Unido los falsos positivos se redujeron en un 1,2% y los falsos negativos en un 2,7%.

Posibilidades de la herramienta en un futuro

En la actualidad, las mamografías generan con frecuencia falsos positivos y negativos a causa de la dificultad a la hora de interpretar las imágenes de rayos X. En consecuencia, se producen retrasos en los diagnósticos así como en el comienzo de los tratamientos, además del estrés generado al paciente y la carga extra de trabajo que debe soportar el radiólogo.

Es por ello que, si esta herramienta de IA funcionase en entorno real, podría ser una ayuda para los radiólogos y supondría una gran evolución a la hora de aumentar la velocidad en la detección del cáncer de mama así como de aportar mayor seguridad en dichos resultados.

A falta de evolucionar el algoritmo de este sistema con mayor información y estudio de todas las tecnologías utilizadas en la actualidad para realizar mamografías, se espera que esta IA pueda funcionar correctamente en el mundo real y que pueda aportar mayor precisión y eficiencia a la hora de detectar el cáncer de mama y de reducir los tiempos de espera.