TAC y RM, dos técnicas imagenológicas, dos grandes avances de la medicina y en especial de la radiología. Ambas permiten diagnosticar y detectar enfermedades eficazmente con métodos no invasivos y sin necesidad de utilizar técnicas molestas y agresivas para el paciente, como pueden ser las punciones lumbares o artrografías.
Para tener un conocimiento más amplio de la TAC y RM, en este post te explicaremos en qué consisten estas técnicas, cuándo utilizarlas y las principales diferencias entre ellas, ¡ahí va!:
¿Qué es el TAC y cuándo utilizarlo?
El TAC, al igual que los rayos X tradicionales, produce múltiples imágenes o fotografías del interior del cuerpo. Pero, ¿cómo lo hace? Lanza una multitud de rayos X desde diferentes ángulos que son absorbidos en distinta medida por cada tipología de tejido, devolviendo imágenes más o menos débiles. En muchas ocasiones, se necesita inyectar un contraste en la vena para diferenciar los vasos sanguíneos y ver cómo se comportan los tejidos con dicha inyección.
A través de la tomografía computarizada, los radiólogos pueden diagnosticar posibles patologías con más facilidad, como el cáncer, enfermedades cardiovasculares, enfermedades infecciosas, trastornos musculoesqueléticos y traumatismos.
¿Qué es la RM y cuándo utilizarla?
La resonancia magnética, en cambio, proyecta imágenes de los órganos y las estructuras del cuerpo humano a través de un campo magnético y ondas de radio muy potentes, mostrando así los tejidos blandos como son los músculos, tendones, meniscos o ligamentos.
La RM se suele utilizar para el diagnóstico de diferentes enfermedades oncológicas, cardiovasculares, neurológicas, musculares o abdominales. Asimismo, estas imágenes ayudan a reconocer aneurismas, infartos, tumores, problemas en huesos y articulaciones como la artritis o complicaciones en la columna vertebral como las hernias discales.
Diferencias principales entre TAC y RM:
- Lo que las diferencia por encima de todo, es que el TAC utiliza radiación en la realización de las pruebas pertinentes y la RM, en cambio, no.
- Un TAC dura aproximadamente media hora, sin embargo una resonancia magnética suele durar más de una hora.
- La máquina del TAC es completamente silenciosa, en cambio la de la RM emite un fuerte ruido que puede llegar a ser molesto para el paciente.
- Los equipos que se utilizan en las pruebas de TAC suelen ser más económicos, mientras que el equipamiento de la RM es más caro.
- Cuando un paciente va a realizarse una RM, debe tener en cuenta que no puede llevar objetos metálicos o marcapasos para no interrumpir las ondas de radio y campos magnéticos.
- La RM se caracteriza también por su alta resolución espacial (se refiere a la finura de detalles visibles en una imagen).
A modo de conclusión, destacaremos que aunque se trata de dos técnicas distintas, en la mayoría de las ocasiones una complementa a la otra y se interpretan los resultados conjuntamente, lo que ayuda a que los diagnósticos de los radiólogos sean más completos y fiables.