La mielografía, también conocida como mielograma, es un examen que permite el estudio de la médula y el canal espinal. Esta técnica radiológica se utiliza para visualizar el espacio subaracnoideo espinal mediante la introducción de un contraste iodado a través de la punción lumbar.
La mielografía consiste en…
Como comentamos, se trata de un examen por imágenes en el que se realiza una inyección de un contraste soluble no ionizante en el canal espinal. Y, posteriormente, se realizan radiografías o una tomografía axial computadorizada (TAC) para poder valorar la correcta distribución del contraste en el líquido cefalorraquídeo y la morfología de la médula y las raíces espinales.
La inyección del contraste soluble en el espacio subaracnoideo que rodea las raíces nerviosas y la médula espinal, permite al radiólogo observar con más precisión los contornos de las diferentes áreas de la columna que generalmente no son visibles o no pueden distinguirse claramente con rayos X.
Usos comunes de la mielografía:
De manera habitual es la resonancia magnética (RM) el examen que se utiliza para evaluar la médula espinal y las raíces nerviosas. Pero es en casos específicos en los que se apuesta por la mielografía en lugar de la RM, y entre estos destacamos:
- Pacientes que llevan dispositivos médicos como marcapasos cardíacos (lo cual impide la realización de una RM).
- Para la detección de tumores que involucran las vértebras, las meninges, las raíces nerviosas o la médula espinal.
- Para evaluar infecciones que involucran las vértebras, los discos intervertebrales, las meninges y los tejidos blandos aledaños
- Detectar la inflamación de la membrana aracnoidea que cubre la médula espinal.
- Evaluar lesiones en la médula espinal causadas por una enfermedad o trauma.
- Detectar las anormalidades que afectan a la médula espinal, el conducto raquídeo, las raíces nerviosas espinales y los vasos sanguíneos que suministran a la médula espinal
Debemos destacar al mismo tiempo las limitaciones que tiene el uso de la mielografía, las cuales son las siguientes según la revista RadiologyInfo:
- Únicamente permite observar dentro del conducto raquídeo y las raíces nerviosas espinales adyacentes. Seguramente las anormalidades fuera de estas áreas se observen mejor a través de una RM o TAC.
- Normalmente durante el embarazo la mielografía se evita debido al riesgo potencial de irradiar al bebé.
- Puede ser complicado inyectar el material de contraste en aquellos pacientes con defectos estructurales en la columna o después de sufrir algunos tipos de lesiones en la misma.
- No es recomendable llevarse a cabo la mielografía en un lugar de inyección que se encuentre infectado. En ese caso, se tendrá que seleccionar un sitio de inyección diferente.